Las recreaciones post “descubrimiento” de América, nos muestran que poco después de llegar a Guanahani, Cristóbal Colón se maravilló con la cantidad de oro que tenían los indios que habitaban el lugar. Su asombro creció cuando los nativos ofrecieron cambiarle el metal por espejitos de colores y cascabeles, lo que a la larga acrecentó el mito de la existencia de la mítica ciudad de Eldorado y sirvió de aliciente para el saqueo de las riquezas del “Nuevo Mundo”.
Durante los 500 años siguientes, el intercambio tomó otras formas y, a caballo de las asimetrías existentes, las economías centrales hicieron lo mismo con las economías de los países emergentes con similares resultados.
Algo así ocurrió con Talleres. Al borde de la desaparición, Ateliers SA, creada hace un par de años por el empresario Carlos Granero, apareció en escena y ganó no sin polémica la licitación para hacerse cargo del club de barrio Jardín. Con el respaldo del club Saint Etienne de Francia, Granero irrumpió en la escena política albiazul junto a los ex jugadores Osvaldo Piazza y Julio Ricardo Villa en carácter de secretarios técnicos. Un programa de intercambio para jugadores juveniles, incorporaciones de nivel, reconstrucción el estadio barrio Jardín, etcétera, fueron algunos de los espejitos de colores.
Sin embargo, con el correr del tiempo, los resultados no se dieron (el club sólo peleó el ascenso en 2006) y, paulatinamente, los franceses comenzaron a desligarse del tema. Consecuencia: Saint Etienne se desvinculó de Ateliers, que comenzó a hacer agua financieramente.
Esto repercutió deportiva y administrativamente en el club a punto tal que a fines de 2007, la gerenciadora fue intimada a regularizar el pago del canon semestral y ponerse al día con los sueldos de empleados y futbolistas.
Pero a menos de un mes de iniciado el año, apareció el grupo mexicano encabezado por el empresario cordobés Carlos Ahumada (foto), que en pocos días se haría cargo gran parte del paquete accionario de Ateliers y pondría el dinero necesario para incorporar a jugadores “de renombre” Esta vez: ¿cuál será color de los espejitos?
Publicado en Hoy Día Córdoba el 22-1-08
Durante los 500 años siguientes, el intercambio tomó otras formas y, a caballo de las asimetrías existentes, las economías centrales hicieron lo mismo con las economías de los países emergentes con similares resultados.
Algo así ocurrió con Talleres. Al borde de la desaparición, Ateliers SA, creada hace un par de años por el empresario Carlos Granero, apareció en escena y ganó no sin polémica la licitación para hacerse cargo del club de barrio Jardín. Con el respaldo del club Saint Etienne de Francia, Granero irrumpió en la escena política albiazul junto a los ex jugadores Osvaldo Piazza y Julio Ricardo Villa en carácter de secretarios técnicos. Un programa de intercambio para jugadores juveniles, incorporaciones de nivel, reconstrucción el estadio barrio Jardín, etcétera, fueron algunos de los espejitos de colores.
Sin embargo, con el correr del tiempo, los resultados no se dieron (el club sólo peleó el ascenso en 2006) y, paulatinamente, los franceses comenzaron a desligarse del tema. Consecuencia: Saint Etienne se desvinculó de Ateliers, que comenzó a hacer agua financieramente.
Esto repercutió deportiva y administrativamente en el club a punto tal que a fines de 2007, la gerenciadora fue intimada a regularizar el pago del canon semestral y ponerse al día con los sueldos de empleados y futbolistas.
Pero a menos de un mes de iniciado el año, apareció el grupo mexicano encabezado por el empresario cordobés Carlos Ahumada (foto), que en pocos días se haría cargo gran parte del paquete accionario de Ateliers y pondría el dinero necesario para incorporar a jugadores “de renombre” Esta vez: ¿cuál será color de los espejitos?
Publicado en Hoy Día Córdoba el 22-1-08
Foto: La Voz del Interior (flor de foto, por cierto)
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