Tiempo al tiempo

Las anunciadas salidas de Héctor Rivoira y Salvador Capitano de Instituto y Talleres, respectivamente, pusieron otra vez en funcionamiento la famosa picadora de carne en que se transformó el oficio de entrenador de fútbol.
Con apenas 11 partidos disputados, poco más de un cuarto del torneo largo de la Primera B Nacional, la histeria colectiva demostró que la mentalidad “cortoplacista” de todos los que formamos parte del fútbol (periodistas, dirigentes, hinchas y jugadores) sigue intacta.
Las estadísticas son elocuentes. En lo que va de un campeonato de 38 fechas, seis técnicos pasaron a engrosar las listas de desempleados, incluyendo a los dos nuevos integrantes: Capitano y Rivoira.
O sea que por más que tiempo para trabajar sea el necesario para que un proyecto “camine”, la realidad se encargó de demostrar que hará falta mucho tiempo para el fútbol todas las patas de la mesa aprendan a respetar los tiempos. Es que salvo excepciones, es muy difícil que en tres meses un equipo ande afinado y aceitado. Si los resultados son buenos, bienvenido sea. De lo contrario, la cabeza del técnico rodará con rapidez, como si el campeonato durara 19 fechas.
Un caso testigo es Belgrano. Bajo la conducción de Francisco Ferraro, quien está hace medio año en el club, a la B todavía le cuesta lograr buen nivel de juego. Sin embargo, Pancho puede para trabajar tranquilo porque que la B está soplándole la nuca al líder, San Martín.
Pero en el hipotético caso de que el Celeste estuviera en la mitad de la tabla, ¿hace falta decir cuál sería el clima en Alberdi? Las respuestas pueden encontrarse en Alta Córdoba y barrio Jardín.
En las antípodas se encuentra Lanús. Con muchos jugadores de las inferiores y un técnico con una “antigüedad” de dos años, es líder del torneo Apertura (19 fechas) y saborea uno de los momentos más exitosos en la historia del club. Ahí nomás está Tigre, que desde hace poco más de un año tiene a Diego Cagna en el banco de suplentes.
Tiempo al tiempo, reza el viejo dicho al que, por el bien de todos, habrá que acostumbrarse.

*Publicado en Hoy Día Córdoba el 23-10-07