A principios de la década, cuando ya había dejado de ser una promesa para convertirse en una realidad, Angel Cabrera no ocultaba sus esperanzas al señalar que “algún día ganaré un torneo grande”. Según consigna en su página de Internet, http://www.angelcabrera.com/, el Pato se metió como caddie por insistencia de sus amigos, que juntaban algunos “mangos” en el Córdoba Golf Club. “Voy a ver de qué se trata”, indicó un Cabrera de apenas diez años. Apenas ocho años después, cuando finalizó en la sexta posición del Abierto del Centro, el destino le indicó que lo suyo era el golf. Luego de cuatro intentos “por hacer la Europa”, el Pato se clasificó en 1995 para el European Tour de 1996, gracias a la ayuda del otro hijo pródigo de Villa Allende: Eduardo “Gato” Romero.
Ese fue el primer mojón de su carrera deportiva, ya que a partir de ese año comenzó a consolidarse entre los mejores del circuito europeo, logrando tres títulos: el Abierto de Argentina 2001, el Benson and Hedges International Open 2002 y el BMW Championship 2005.
Sin embargo, como bien indicó apenas ganó el US Open, ganar en Estados Unidos era una cuenta pendiente, más allá que disfruta más el ambiente europeo que la “frialdad” norteamericana. La espina se la sacó nada menos que ganando el segundo Major del año, el primero desde que un tal Roberto De Vicenzo se llevara el Abierto de Inglaterra, en 1967.
De esta manera, junto con Emanuel Ginóbili, campeón de la NBA, el Pato se sumó al olimpo de deportistas cuyo simple apellido remite a la disciplina que practican. O sea que a partir del domingo, golf en Argentina se dice De Vicenzo y... Cabrera.
*Publicado en Hoy Día Córdoba el 19-06-07
Ese fue el primer mojón de su carrera deportiva, ya que a partir de ese año comenzó a consolidarse entre los mejores del circuito europeo, logrando tres títulos: el Abierto de Argentina 2001, el Benson and Hedges International Open 2002 y el BMW Championship 2005.
Sin embargo, como bien indicó apenas ganó el US Open, ganar en Estados Unidos era una cuenta pendiente, más allá que disfruta más el ambiente europeo que la “frialdad” norteamericana. La espina se la sacó nada menos que ganando el segundo Major del año, el primero desde que un tal Roberto De Vicenzo se llevara el Abierto de Inglaterra, en 1967.
De esta manera, junto con Emanuel Ginóbili, campeón de la NBA, el Pato se sumó al olimpo de deportistas cuyo simple apellido remite a la disciplina que practican. O sea que a partir del domingo, golf en Argentina se dice De Vicenzo y... Cabrera.
*Publicado en Hoy Día Córdoba el 19-06-07
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